La Otra Voz de Benavente y Los Valles

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miércoles, mayo 01, 2013

El estado del patrimonio zamorano

PREOCUPACIÓN POR EL DETERIORO DE VARIOS BIC DE LA PROVINCIA DE ZAMORA

Martín Benito solicita a la Junta los informes sobre la iglesia de Molacillos, de San Pedro del Olmo (Toro) y de Castrotorafe

Insta a la Junta a invertir en restauración para paliar el desempleo y garantizar el atractivo turístico del patrimonio cultural

El progresivo deterioro que sufren varios Bienes de Interés Cultural de la provincia de Zamora, ha llevado al procurador socialista, José Ignacio Martín Benito, a solicitar de la Junta de Castilla y León los informes del estado de conservación de varios de ellos. En concreto, en los últimos días, el procurador ha pedido a la Junta los informes correspondientes a los BIC de las iglesia de Molacillos, de San Pedro del Olmo (Toro) y del recinto fortificado de Castrotorafe.

Molacillos

Las goteras, la humedad en el interior han provocado desprendimientos en paredes y pinturas y ponen en riesgo a este BIC, declarado en 1983, la mejor representación del barroco de influencia levantina en la provincia.

San Pedro del Olmo

Como ya denunciara hace unos días el grupo municipal socialista, el abandono es la tónica dominante en este BIC, declarado Monumento Artístico en el año 1929. Precisamente. A la acumulación de basura y maleza en su interior se la desprotección de los ábsides, que guardan pinturas murales de finales del siglo XIII. La última intervención realizada en San Pedro del Olmo fue promovida en el año 1989 por la Fundación González Allende de Toro que, en colaboración con la Escuela Superior de Restauración y Conservación de Bienes Culturales de Madrid, recuperó las pinturas murales del ábside y procedió a la limpieza del templo y a la colocación de unos cerramientos en dichos ábsides. Actualmente estos cerramientos están rotos.

Castrotorafe

Los sucesivos derrumbes que se vienen produciendo en las murallas de este despoblado, aceleran el deterioro nuevo derrumbe en un lienzo de la muralla acelera el declive y deterioro de esta fortaleza enclavada a orilla del Esla, en el término de San Cebrián de Castro. Castrotorafe es la gran asignatura pendiente del patrimonio histórico-cultural zamorano. Propiedad de la Diputación Provincial, sus ruinas languidecen y se deterioran invierno tras invierno, ante la mirada impotente de curiosos y visitantes. Desde que se acometieran los últimos trabajos de consolidación de las ruinas y limpieza en la zona del castillo, en el año 2010, no se ha vuelto a actuar en recinto histórico, declarado Monumento Nacional en el año 1931.

Inversión en restauración y empleo

El procurador socialista estima que las administraciones deben acometer obras de restauración en estos enclaves por dos motivos: para garantizar su conservación y, por tanto, su atracción como producto turístico y, también para estimular la actividad empresarial de las empresas de restauración y paliar el empleo en el sector de la construcción, en una provincia tan castigada por el desempleo.