Diario del peregrino del Hospital (y XI)

DE SEVILLA A SANTIAGO

Por Santiago Ferreras Vecino

Día 31 de Mayo de 2006
Camping Meledo (Bandeira. Silleda) – Santiago

A las siete de la mañana nos despierta la luz de la ventana, pues la habitación no tiene persiana. Nos levantamos desayunamos algo de lo que sobró de la cena y afrontamos la última etapa del camino. Vicente está dormido, así que no podemos despedirnos de él.
Por una carretera secundaria nos dirigimos a Bandeira. Por segundo día hace mucho fresco, bueno, más que fresco: hace frío. Son 12 km. de descenso hasta Ponte Ulla; pasamos de 350 m a 64 m, por la carretera nacional. Entramos en la provincia de La Coruña y ya estamos a poco más de 21 km. de Santiago de Compostela.
En este tramo final entramos nuevamente en el camino. Subimos por una pequeña carretera. Después por caminos de tierra, comenzamos una fuerte ascensión al Pico Sacro. Tras pedalear entre robles y eucaliptos y algún tramo asfaltado, salimos a la N-525 muy cerca de la población de Susana, estamos a 9 nueve km. de nuestra meta.
Intentamos volver al camino, pero no encontramos la señalización de flechas amarillas, así que decidimos continuar por la carretera este último tramo. Para llegar a Santiago nos queda una última subida hasta cruzar la autopista del Atlántico. Entramos por la Rua da Virxen de Fátima.
En primer lugar nos dirigimos a la estación de autobuses para sacar los billetes del bus para Benavente y dejar todas cosas en la consigna. Hemos tardado tres horas en culminar esta última etapa del camino; son las 11 de la mañana.
Nos cambiamos de ropa y guardamos todo lo que no necesitamos en una consigna automática. Sacamos los billetes para las 21, 30 h. y nos vamos hacia la catedral. En estos momentos se siente una gran satisfacción por haber cumplido el objetivo y realizado la meta prevista. A pesar de algunas dificultades, estamos aquí en el tiempo previsto. Nos hacemos unas fotos con las bicis y nos dirigimos hacia “atención al peregrino”. Dejamos las bicis allí y vamos a la catedral, porque van a ser las 12,00h. y comienza la misa del peregrino.
La catedral esta llena de peregrinos, turistas y visitantes. Nos sentamos en el suelo junto a una columna en la parte de atrás. Asistimos a la misa, aunque en algunos momentos por el cansancio acumulado cerramos los ojos y… Es la 1 h. del mediodía y nos dirigimos a comer en Casa Manolo. En la puerta nos encontramos con otro grupo de peregrinos en bicicleta. Han hecho el camino de Santiago por la vía de la Plata. Hay uno que es de Almería. Nos sentamos juntos a comer, compartiendo aventuras y desventuras de algunos tramos y lugares por los que hemos pasado.
Nos despedimos de ellos después de comer. Nos acercamos a recoger nuestra compostelana en atención al peregrino y dar un fuerte abrazo al Santo en la Catedral. Son las 3 h. de la tarde, hace mucho calor y estamos bastante cansados.
Decidimos ir a un parque, para tumbarnos en la hierba a la sombra de un árbol para descansar. Es una buena idea; se está muy bien. Tumbados tranquilamente hacemos planes para los próximos días que vamos a pasar juntos en Benavente: realizar una visita obligatoria al lago de Sanabria, lagunas de Villafáfila y monasterio de la Granja de Moreruela.
Por la tarde realizamos las compras de algunos regalitos para nuestras familias. A media tarde compramos para cenar y nos dirigimos a la estación de autobuses para finalizar esta aventura. Se acumulan sentimientos: por un lado la satisfacción de haber cumplido el objetivo propuesto, pero por otro lado una pequeña pena porque se estaba acabando una gran aventura que hemos vivido intensamente durante los últimos diez días.
Pero ahora que esta página se cierra, no es solamente el final de algo, también es el comienzo de una amistad, y el inicio de la preparación del Camino del Norte, que realizaremos para el año que viene.
Quiero terminar dando las gracias a todas las personas que nos han ayudado a lo largo de esta peregrinación. Hay mucha gente buena, anónima y desinteresada que tiende una mano amiga a los peregrinos del Camino de Santiago.

¡¡¡GRACIAS!!!